Un virus manipulado en laboratorios de ¨ guerra bacteriológica ¨ contra población trabajadora envejeciente
Por Miguel Aponte Viguera
Santo Domingo.- El primer caso de enfermedad por coronavirus en República Dominicana se confirmó hacia el 1 de marzo de 2020.
Se trataba de un turista italiano de 62 años, el cual había llegado a la isla caribeña poco antes sin presentar síntomas.1
Pero luego se conoció que países latinoamericanos, como México, Brasil y Ecuador habían anunciado la presencia de personas contagiadas en sus territorios.
El 17 de marzo, el presidente dominicano y miembro destacado del gobernante Partido de la Liberación comunicó a la población de la media isla una serie de medidas que incluían el cierre de fronteras, la suspensión de actividades educativas y la cancelación de eventos públicos.3
Poco después el Congreso Nacional, siguiendo orientaciones del Poder Ejecutivo, decretó el Estado de Emergencia y el 20 de marzo el presidente reveló a todo el mundo un toque de queda nocturno luego de que 72 casos habían sido confirmados en el país…
Explicamos que Danilo Medina y el Penco Gonzalo, fueron los dos desalmados que durante la más tenebrosa noche de la covid-19 y usando no solamente las migajas que arrojaban a los hambreados del pueblo trabajador durante las noches oscuras de la pandemia, también echaron manos a la soldadesca policíaco-militar al ser arrojadas a sembrar el terror en medio del proceso electoral fallido para la dictadura del ¨ PALIDO ¨ – danilista.
La alta jerarquía policíaco-militar, al servicio de la dictadura peledanilista, echaría contra el pueblo trabajador toda suerte de medidas para su protección personal e indumentarias de guerra, en manifiesto afán de experimentar tácticas de control de muchedumbre sometida a cualquier suerte de ¨ estado sitio ¨ o toque de queda (medidas que se aplicarían en los USA frente a los brotes incontrolables de rebeldía popular) originada por los asesinatos de ciudadanos afroamericanos y la brutal represión en las entrañas del monstruo capitalista.
Mientras las hordas de la represión danilista se cebaban contra la población diezmada por la pandemia del coronavirus, los medios digitales alternativos y alguna prensa burguesa mostraban los hechos y denuncias sobre dichos actos y atropellos contra obreros, trabajadores en general, periodistas, fotógrafos, enfermeras-os, médicos, hombres y mujeres del pueblo a los cuales apresaban y golpeaban durante las inservibles horas de toque de queda impuesto…mientras el El Penco y la Guaba capeaban por las noches en aviesa campaña electoral con sus ¨ repartidoras de panecillos y pica-pica con arroz, como también en el sol candente del trópico y sus fumigadoras con repartideras de dinero en efectivo, para doblegar -sin lograrlo- la voluntad de los electores-as, en violación a las supuestas medidas de distanciamiento social y obligatoriedad de uso de mascarilla y guantes.
También llegaría la incursión del clero reaccionario y anti-pueblo, cuando apoyado por la gendarmería del sistema, junto a bomberos y funcionarios del Estado con unidades de la emergencia del 911 patrocinarían al ¨enviado de Dios ¨ en la norteña Puerto Plata ¨ peredanilogrino ¨, llevando a grandes grupos de energúmenos hacia las costas del Atlántico para sepultar ¨ con la siembra de la cruz ¨ cristiana al mortal virus manipulado en los laboratorios del Imperio contra obreros y pueblo trabajador envejeciente.
!Esas razones son suficientes para pedirle cuentas a Danilo Medina Sánchez y sus paniaguados, tipo el Penco Gonzalo junto al Comité Político pelediano que llevaron a las masas al sacrificio y matadero real por la covid-19 !